Nostalgia del Vago
Me despierto y la oscuridad no compagina con las mañanas regulares. Está nublado, y llueve intermitentemente...ahí me asalta la nostalgia del vago.
Cuando vivía en Cuba, en días así el
no ir a la escuela estaba asegurado, y solo hago referencia a la
escuela pues no llegué a tener la experiencia laboral (seguro era
igual.) Todos entendían que en plena lluvia uno no iba a estar una hora
esperando una guagua*, o caminando media Guanabacoa para llegar a la
escuela y correr el riesgo de enfermarse y no poder ir por el resto de
la semana. O preocupándose porque se te mojara la mochila y por ende
todos los libros y libretas que tenías adentro, y se perdieran con el
agua todas las notas de clase. O que el uniforme de la semana se
ensuciara por un camionero que en su descuido salpicara un charco de
fango. En fin, los motivos eran muchos, era mas lógico quedarse en casa.
En casa, podía salir a bañarme en el aguacero, y correr el riesgo de
enfermarme. Tirarme por la escalera mojada a la posibilidad de una
partida de hueso. Meterme bajo el chorro de agua que salía de la tubería
de la fabrica de papel y ducharme con las ranas y sus primos. Correr
calle abajo y chapotear los charcos, sin zapatos. En fin, era mas lógico
quedarse en casa, será por eso que me gustan tanto los días de lluvia,
aunque ya no haga nada de eso.
Recuerdo un día que fui a la escuela con lluvia y fue traumático, se
inundo la escuela y el agua nos llego por encima de los calcañales. Por
supuesto que no hubo niño que se concentrara en un 2+2=4. Ese día,
hubiera sido mas lógico quedarse en casa.
Pero hoy en día que vivo fuera de Casa, me toca disfrazarme con mi
sombrilla transparente con forma de burbuja, y mis botas plásticas de
"plaid" y encaminarme a la experiencia laboral. Ahí no entenderían mi
lógica.
*guagua: autobus
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