La Malanga

Fue la planta de mi infancia, a mi mama le debía gustar mucho supuse yo en algún momento de mi niñez. Sin embargo, ahora me doy cuenta que el hecho de que la malanga fuera la planta nacional de mi casa se debía a su poder de sobrevivir bajo cualquier circunstancia. La revelación llego a mi cuando, ya una adulta, tuve mi propia casa y decidí añadirle una planta a la decoración de esta, escogiendo una malanga.

Mi malanga se pasa días y días sin saber de mi, entonces un día la miro y me doy cuenta que su a veces intenso color verde, esta mutando a un amarillo carmelitoso. Me pongo de puntillas, ya que esta en el quicio de la ventanita del baño y noto que la tierra esta cuarteada y ahí me digo "Debería echarle agua."

Un día a esta malanga le habían crecido unos tallos larguísimos, los cuales perdieron todas sus hojas debido a la enfermedad de las hojas amarillas carmelitosas (que ya todos conocemos la verdadera causa) entonces decidí cortárselos por cuestiones estéticas. En vez de botarlos todos, escogí uno y lo sembré. Este tallo si digo que le tomó meses retoñar...tal vez este exagerando, pero así se sintió. Aun así valió la pena, aquí la raza evoluciono. A esta malanguita nunca se le ponen las hojas amarillas, solo se tira al piso, y ahí yo se que "debería echarle agua."



Comments

Popular Posts